miércoles, 6 de marzo de 2013

Se acerca el otoño
y cada hora se tiñe de melancolía...
Atardece y puedo sentir
al sol lléndose triste y resignado,
no sin antes dejarme su beso apasionado.
"Amor mío, no te angusties,
estaré en casa antes que tú te des cuenta.
Vamos amor mío, déjame regalarte
mis naranjas, mis rojos y amarillos.
Déjame besarte, calurosamente amor mío,
tus angustiadas mejillas."

No hay comentarios:

Publicar un comentario